Hoher Markt: una plaza con historia
Hoher Markt es la plaza más antigua de Viena. En su centro se encuentra una fuente esculpida, pero la mayor atracción turística es el Ankeruhr: un gran reloj dorado realizado en 1914.
Durante la Edad Media, el lugar que hoy ocupa el Hoher Markt fue uno de los lugares de mercado más importantes de la ciudad. También fue el sitio de una picota y horca.
El área también fue lugar de una ciudad de guarnición romana llamada Vindobona. Ruinas romanas fueron reveladas durante las excavaciones después de la Segunda Guerra Mundial. En un museo subterráneo se pueden ver los restos de lo que se cree que eran las casas de oficiales, así como algunas piezas de cerámica y relieves.
Fuente de la boda
El Vermählungsbrunnen (fuente de la boda) atrae inmediatamente la atención. La fuente fue encargada por el emperador Leopold I, que quería celebrar el regreso de su hijo José del asedio de Landau. Por lo tanto, la fuente es también conocida como el Josefsbrunnen.
La fuente monumental fue diseñada por el arquitecto de la corte, Johann Bernhard Fischer von Erlach y construida entre 1729 y 1732 por su hijo, Joseph Emanuel. La fuente representa el supuesto matrimonio entre José y María por el sumo sacerdote bajo un baldaquino de bronce, apoyado por cuatro grandes columnas corintias.
Ankeruhr
La atracción estrella en Hoher Markt es el Ankeruhr: un gran reloj dorado en estilo Jugendstil (la versión local del arte nouveau). El reloj se encuentra en un pequeño callejón, el Bauernmarkt. Fue encargado por la compañía de seguros Der Anker –de ahí su nombre- y fue construido en 1917, a partir de un diseño de Franz Matsch.
Cada hora aparece una figura dorada que representa a una figura histórica, acompañada por música de órgano. Al filo del mediodía, cada una de las doce figuras aparece una por una, espectáculo que a menudo atrae a una multitud. Una placa pequeña cerca del reloj identifica cada una de las doce figuras.
